Después de haber tenido una de las mejores pláticas que he tenido en estos días, como siempre de madrugada, muchas ideas vinieron a mi mente que se me antojó escribir aquí.

Lo más interesante de todo, fue que mientras tenía esta plática, sin yo decir una palabra, me dijo la otra persona: "Y no vayas a poner esto en tu blog, ¿eh?" - Me sorprendió de sobremanera que dijera esas palabras porque precisamente en ese momento estaba pensando en que quería compartirlo aquí. Sigo creyendo que esa persona tiene alguna clase de poder para leer mi mente ó algo por el estilo. 

La plática giró en torno al amor. Fueron muchos temas muy interesantes sobre el amor, pero hubo una parte de la conversación que fue mi favorita. 

-¿Crees que existe el amor para toda la vida? ¿De esos que por más que tienes otras relaciones ó pasan los años nunca olvidas?- le pregunté.

-No lo creo así tal cual lo planteas, lo que yo creo es que va a llegar una persona a tu vida que te hará ver una parte del amor que no conocías, más allá de lo que tu crees que es el amor hasta ahora. Por ejemplo, esta pared, es mi pared, es todo lo que yo conozco y para mí no existe nada más allá, pero me encanta, porque esa pared me puede dar todo de sí, pero un día, llega otra pared, metros más atrás que me enseña que existe mucho más allá que la primera pared, que hay un mundo entero que desconocía. Sin embargo, creo que muchas veces el primer amor, el primer amor de verdad, no se olvida. Entiendes que las cosas terminaron. Y no digo que el amor, muchas veces se terminó el tiempo de estar juntos. Hasta ahí. Pero muchas veces al paso de los años sigues añorando lo que viviste con esa persona, ó la manera en que te hacía sentir, pero sabes que las cosas ya no pueden ser. Es la magia de lo que fue. Y quizás en este momento ya no volvería a ser. Pero siempre existirá ese cariño especial, ¿sabes?