Me gustaría asegurarme que estás bien. 

Que esa sonrisa que tanto podía contemplar sigue en su lugar, que tus ojos ya no conocen las lágrimas sabor a mí y que duermes porfin las noches enteras. 

Me gustaría preguntarte como va tu vida, si haz encontrado alguien que cuide tus dolores de cabeza y si haz aprendido que el amor es como la vida y puede acabarse en cualquier momento. Sólo quiero saber que estás bien, vaya.... Nada más.

Te invitaría un café o dos, pero no quiero recordar nuestro pasado. Cuéntame de tus planes para el futuro y quien ocupa mi lugar, todo con esa sonrisa que tanto podía contemplar ahí puesta en su lugar.