Encuentres lo que buscas.

Vuelvas cada vez a pedir el platillo que siempre ordenábamos en la comida china.

Llegue alguien que también escriba poemas de amor sobre ti. 

(Pero que nunca sean más bonitos que los míos)

No tengas que calentar más pies de noche. 

Sigas prestando atención a los detalles chiquitos de la vida.

No leas a nadie más tu libro favorito en voz alta mientras van en un avión.

Te quiten el sueño en las madrugadas a causa de un millón de risas.

No te llamen usando nuestros sobrenombres. 

Consigas una pareja de baile que haga la salsa ser más divertida que conmigo.

Alguien se enamore de tu labio inferior y quiera besarlo a cada instante. 

No vuelvas a decirle a nadie que su ausencia te provoca un nudo en el estómago.

No intercambies besos y bostezos. 

Te pregunten por tus sueños y no te dejen olvidarlos.

Alguien quiera escuchar tu corazón latir mientras te abraza.

Espero que después de mí encuentres quien empiece a extrañarte al segundo de haberse ido de ti, porque desde entonces, yo no he podido parar.