El otro día me recordaron que hace 7 años, cuando salí de la prepa,  escribí una carta a mi yo de 24 y que tenía que pasar a recogerla.

Pasaron meses antes de que me diera el tiempo de ir por ella, pero siempre que me acordaba de su existencia, me imaginaba la infinidad de cosas que podrían venir ahí



Estaba segura que en esa carta encontraría la respuesta a todos mis problemas existenciales... (ja, ja)..

Después de mucho tiempo, llegó el día. El director de la preparatoria (que sigue siendo el mismo), me dio la carta junto con un abrazo y nos pusimos al día en unos minutos... la verdad es que yo solo pensaba en la carta que tenía en mis manos. 

Llegué al carro y a pesar de tener prisa por llegar al trabajo, abrí desesperadamente el sobre blanco que tenía mi nombre escrito con la caligrafía de Ana a los 17 años en tinta azul.

Mi primer decepción me la llevé al encontrarme únicamente con una hoja. No había letras del otro lado, no había algún tipo de recuerdo, regalo o complemento. Solo una hoja con unas cuantas letras.... 

Fui perdiendo la ilusión de encontrar una respuesta en esa carta mientras leía:
Empezaba nombrando a todos mis amigos del momento, con nombre y apellido (lo cual abarcaba unos dos párrafos de los 6 que había), mencioné a mi amor del momento (claro está...) Miguel, que ahora está casado y tiene una hermosa princesa. Escribí uno o dos enunciados en los que decía que "ojalá" hubiera viajado a uno u otro país para entonces... y al final, cerré con una frase que para mí hizo toda la carta."Disfruta a tu familia, espero que todos sigan contigo... y si no, piensa y pide por ellos". Y lloré, un poquito, pero lloré con el corazón apachurrado.

Después de leerla sentí que no había encontrado nada, manifesté mi frustración a mi familia y todos se rieron. Mi mamá me vio y me dijo " Esperabas leer a la Ana escritora de 25..."

En ese momento probablemente no significó nada para mí. Pero ahora que lo pienso, creo que en esa carta sí estaba la respuesta a todo. Puede ser que siempre le veo más significado a las cosas, pero de cualquier manera, voy a enlistar lo que creo que viene implícito en esas letras.

1. La gente va y la gente viene. 
Aquellas personas que creí que estarían a mi lado para siempre, hoy no lo están. Algunas se fueron completamente de mi vida... y gracias a dios, otras siguen a mi lado. En la carta digo, "Yovenes es tu mejor amigo y seguramente lo sigue siendo. En caso de que no, búscalo y recuérdale los momentos que vivieron"... Yovenes sufrió un "accidente" hace un año en el que su vida pendía de un hilo. Así que leer eso de "seguramente lo sigue siendo"... no es aburrido, es un recordatorio de que tengo MUCHO que agradecerle a la vida.

2. El amor es bonito aún después de terminar.
Sí, es muy triste cuando una historia de amor acaba, cuando pierdes contacto con alguien o simplemente saber que no están destinados a estar juntos... Pero qué lindo es saber que esa historia sucedió, ¿no?... Cuando pasa el tiempo y el corazón sana, el amor es lindo incluso después de terminar. Los recuerdos, lo malo y lo bueno, los aprendizajes. Yo pienso en Miguel y me da alegría, aún le tengo mucho cariño y aprecio a pesar de que no hablamos ni poquito. Y eso me hizo pensar en todos los demás amores que han pasado por mi vida desde entonces... (y creo que eso es mucho para estar en una sola carta)

3. "Espero que hayas conocido  Brasil y/o Canadá"
Pues no, no conozco Brasil. Pero sí fui a Canadá y conozco 11 o 12 países más. Así que bueno, creo que no he defraudado a esa parte de mi Ana de 17. Supongo que ahora tendré que ir a Brasil, no por nada volví a leer esas palabras en estos momentos...

4. "Disfruta a tu familia. Espero que todos sigan contigo, y si no, piensa en los que no y pide por ellos"
Como les digo, esta parte de la carta me hizo llorar. No, ya no están todos conmigo. Y eso me hizo recordarlos con mucho amor y recordar a los que sí... Así que por más que sea un renglón, me movió todo por dentro, me hizo pensar que mientras escribí esas letras, todos seguían conmigo. Fue muy raro pensarlo, pero sí pedí por ellos y mucho.


Así que ... a pesar de haber sido una carta corta y a simple vista "boba"... tuvo más significado del que hubiera imaginado.. posiblemente no leí todo como me hubiera gustado, pero lo que me hizo pensar, fue más que suficiente.

Al terminar nuestra reunión, el director me dio otro abrazo y me pidió que me escribiera otra carta mientras me sonreía. ¿Qué palabas de Ana de 25 le irán a mover el mundo a la Ana de 31?